CMON, Cool Mini Or Not, empezó siendo una página web donde la gente podía publicar fotos de sus miniaturas y maquetas pintadas para que el resto de la comunidad votara qué les parecían. De ahí, los propietarios de la web se lanzaron a la publicación de juegos de tablero, principalmente con miniaturas, aunque alguno hay sin.
Uno de sus últimos éxitos ha sido el Rising Sun Kickstarter, que recientemente se ha puesto a la venta en su edición española y podéis encontrar aquí. Este juego de estrategia de ambientación japonesa ha sido comparado con otro juego de la marca: Blood Rage, debido a que están diseñados por el mismo equipo y ambos son juegos de control de áreas. Pero… ¿Es Rising Sun simplemente un Blood Rage de ambientación samurai? Realmente no.
Reseña Rising Sun
Rising Sun es un juego de control de áreas ambientado en el Japón feudal, con toques fantásticos. Se estructura en tres rondas o estaciones, cada una de las cuales se divide en 7 acciones. Los jugadores pueden escoger entre seis clanes diferentes, y el juego ofrece la posibilidad de que cada ronda se produzcan alianzas. Durante cada acción, el jugador activo roba cuatro marcadores de acción al azar y elige uno de ellos. Hay cinco acciones diferentes, que permiten desplegar unidades, cosechar recursos, reforzarse con cartas y habilidades especiales, mover las unidades por el mapa… Todos los jugadores emplearán la misma acción, y el jugador activo va el último, lo que le da la ventaja de ver lo que hacen los demás antes de actuar.
Al final de cada ronda se produce el combate por el control de cada área del mapa. Área por área, los jugadores involucrados usan sus monedas para pujar por diferentes opciones de combate (sepukku, toma de rehenes, uso de ronin…) que al final se totalizarán y decidirán un ganador de la batalla. Pero el dinero pujado se reparte entre los perdedores, así que hay que ir con ojo…
Estos son los elementos básicos del juego: estrategia basada en selección de acciones y puja de recursos, con el añadido de diplomacia entre los jugadores. Un juego sutil y apasionante, y que hay que entender que no va de mover soldaditos por el mapa, es algo más.
Reseña Blood Rage
Blood Rage es un juego ambientado en la era del Ragnarok, en el que clanes de vikingos luchan por la gloria para ser aceptados en el Valhalla. Se estructura en tres eras. Al principio de cada era hay una fase de «draft», donde los jugadores se van alternando para escoger cartas que proporcionan diversas utilidades de juego: equipos y mejoras, objetivos y misiones, bendiciones de los dioses, aliados, cartas de combate… Tras esta fase inicial los jugadores se alternan realizando acciones, como mover, atacar o poner en juego cartas de objetivo. Las victorias proporcionan puntos de victoria y recompensas varias.
Blood Rage es un juego más rápido y directo que Rising Sun, con combates brutales como corresponde a los vikingos. Rising Sun es mas pausado y elegante, con una componente de diplomacia y traición que no tiene Blood Rage. Mecánicamente ya hemos visto que son diferentes: uno se basa en seleccion de acciones y puja de recursos y otro en draft de cartas.
Lo bueno de ambos es que las mecánicas escogidas se integran perfectamente en la ambientación elegida. Y tampoco podemos ignorar la enorme calidad de los componentes, tanto las ilustraciones como las miniaturas.
Sin duda dos apuestas seguras para tu ludoteca.